Attuannik…

Si habéis seguido el blog, o me seguís en instagram, ya os sonará este bonito ‘palabro’.

Viento del Norte en el idioma Inuit, es el significado de esta palabra, que se ha convertido en el nombre de mi modelo de kayak más groenlandés hasta la fecha.
Hace ya 10 años que sobrevolaba en mi mente este tipo de kayak, yh que llegué a plasmar en un modelo predecesor y que nunca llegó a ver la luz, el Wave Rider II.

Una versión más groenlandesa de mi kayak el Wave Rider.
Los años pasaron y seguí navegando con mi WaveRider, cada vez me fui adentrado más en el kayak de estilo groenlandés, sus técnicas y su estética.
hasta el pasado 2022, donde decidí dar un nuevo giro a este diseño e ir más allá de donde había llegado con él.
Ya tenía claras cuales eran sus virtudes y cuales sus carencias, no podía fallar. Así tocó de nuevo, ponerse al día con el software y meter las manos en harina.
De todo esto surgió Attuannik.

Ya hablé de el en la entrevista que me hicieron en Planeta Kayak, y de como iba a enfocar este nuevo proyecto, pues mi condiciones de vida no era ni mucho menos parecidas a las que tenía cuando diseñé y construí el WaveRider.

Y el resultado final es este…

Un kayak de estética groenlandesa, adaptado a palistas de gran tamaño, ideal para practicar maniobras esquimales, sin dejar de lado la travesía y las olas.
Está diseñado para ser construido con el sistema de paneles cubiertos de resina, formando una estructura sanwich, que vamos a denominar sistema LP. Y aunque se basa en el sistema stich & glue, si afinamos con la cubierta final esmaltada, podemos conseguir formas mas redondeadas y estéticas que con el tradicional S&G.
Como no podría construirlo yo por mis limitaciones de espacio y tiempo, Roberto de Nautilus se está encargando de su construcción. Además va a desarrollar una serie de video tutoriales para que podáis construirlo en forma de kits en vuestra propia casa.

Ahora mismo estamos trabajando desarrollando un kits definitivo para que puedas construirlo de manera sencilla y sin problemas. Con el mejor okume marino y la mayor precisión en su corte. Así que permanece atento.
Puede seguirme en instagram para estar informado.

Reparaciones del viejo Wave Rider…

Hace unos meses, practicando eskimos, terminé por romper los anclajes de fibra que sujetan el asiento.

Ha sido un problema recurrente en los últimos años debido a un error de previsión en la fabricación.

En su momento, decidí que era mejor probarlo primero sin colocar los anclajes, por si era necesario cambiar el sitio elegido originalmente en busca de un mejor centro de gravedad. El resultado es que los anclajes quedaron pegado por fuera de la brazola y encima de la pintura final. Al final, con el tiempo y los esfuerzos, las roturas ya fueron irreparables.

Así que toca ingeniárselas para anclar el asiento de otra manera más eficiente.

Así, se me ocurrió colocar unos tacos de madera del tamaño adecuado al lateral del asiento, con las tuercas embebidas en la madera y pegadas a los laterales.

Había que incrustar las tuercas en el interior y sellar todo el taco para evitar que el agua hiciera estragos.

Una vez diseñadas y preparadas las piezas hay retirar los restos del anterior sistema y colocar el nuevo.

Esta fue una reparación expresa para la VI Travesía Amarga y Pica. Y desde luego no quedó del todo bien, así que toca hacer unos retoques.

Un kayak casero….

Con esta premisa Carlos Fabrique nos recopila las distintas formas de construir un kayak que podemos encontrar, en su artículo.
Sinembargo, contruir un kayak require de cierta pericia, buenos materiales y herramientas y de un espacio adecuado.
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El trabajo es arduo, cuando se empieza y no se tiene experiencia, uno se desespera, pero cuando se termina, y se navega en el, la sensación supera lo esperado y el esfuerzo se ve recompensado.
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Espuma…

Últimamente no tengo mucho tiempo para atender el blog, aunque sigo escribiendo y almacenando material, especialmente de reviews y pruebas de equipo, para futuras publicaciones. Pero en esta ocasión no vengo a hablaros de lo que haré mas adelante en el blog, sino de lo que hice.
Este ha sido un verano escaso en viento de levante, lo que mi zona se traduce como escasez de olas, eso implica poco material videográfico y pocas experiencias que contar.
Pero llego el otoño y un par de temporales de levante nos dejaron olas para disfrutar de su poder en la vertiente mediterránea.
La playa de Torreguadiaro nunca ha sido fácil para los kayaks, y meterme con un buen mar de fondo con el WaveRider fue una experiencia entre excitante y sobrecogedora…
No elegir bien el punto de entrada, pueden minar tu moral y tus fuerzas, además los cerrojazos en la orilla no ayudan mucho…
Un fuerte golpe bocabajo contra la arena de la orilla me hizo proclamar a los 4 vientos que ese día me vencieron las olas… apenas pude subirme a un par de ellas, y desde luego no fui yo quien las doblegó… más bien fue al revés…
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The moment…

No matter how many waves you have rided…
Neither its size…
No matter wherever you did it…
Just the vision of the foam coming towards you…
When your knees are fusioned to the hull
When the only link with land are your arms…
When the Centaur takes control…
When we are only one…
This is the moment…
Always the same…
But always unique!

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